Seppo Illmari Koistinen

Aqui, el principio de un juego...

Ambos creamos e imaginamos.

Hoy, él escribe y yo dibujo...

Espero que lo disfruten! 

Puerto antiguo en olvido transfigurado

-los barcos varados unos, los otros anclados-

ausente de hombres y mujeres las manos

-todo lo observa, él, un solo rostro opaco.

En aquel bajo y mudo cielo aquietado

distinguir nunca le fue ni le será otorgado

entre nubarrones violáceos, rojos y azulados

si aún es de día, si la noche ha comenzado

o si el frío no es más que imaginado.

Sólo el mar es lo mismo

y lo mismo es no existir allí:

tanto valen ciudades como mundos

si el resto yermo impide tener raíz.

Los movimientos son exiguos pero cargados;

las gentes desdeñan cuando con ceño cansado

se dan con un parpadeo por saludados

y por respondidos si hay un silencio prolongado.

Es que hablar devino imposible e innecesario

ante todo aquel inmóvil gris entramado

en el que Koistinen comprenderá al fin que ha sido señalado

para repetir, sin alejarse, la suerte del desterrado.

L.Covelli, escrito.
M. Carbo, ilustración